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Estrés en pandemia

Hasta un 70% de la población mundial aprieta o rechina sus dientes

  • Jueves 3 de junio de 2021
  • 10:50 hrs

El cirujano maxilofacial de Clínica Tarapacá, Dr. Carlos Lobo, explicó en qué consiste este trastorno que afecta principalmente a personas de entre 25 y 44 años.

Hasta un 70% de la población mundial se ve afectada por bruxismo, trastorno que consiste básicamente en apretar o rechinar los dientes excesivamente, el cual se produce de manera inconsciente. Según detalló el odontólogo de Clínica Tarapacá, Dr. Carlos Lobo, este hábito se presenta cada vez con mayor frecuencia en nuestra población, debido a los cuadros de ansiedad generados a causa de la pandemia de coronavirus. 

El profesional indicó que dado “el estrés generado, ya sea por la dificultad de libertad de desplazamiento, el miedo a la misma enfermedad y cómo puede afectar nuestro entorno y seres querido, hasta la pérdida de empleo o el exceso laboral que conlleva el teletrabajo, existe un incremento de pacientes que acuden a especialistas por esta razón”. 

BRUXISMO DIURNO Y NOCTURNO

Esta parafunción puede manifestarse durante el día o en la noche. El bruxismo diurno es más fácil de detectar, de acuerdo con el especialista, dado que el paciente puede notar que presiona sus dientes en diferentes situaciones que le generan estrés o presión.

Sin embargo, el bruxismo nocturno suele ser más difícil de reconocer debido a que la persona se encuentra durmiendo. “El paciente puede rechinar los dientes  a raíz de un bruxismo céntrico o apretar los dientes, en lo que se denomina un bruxismo excéntrico”, precisó el Dr. Lobo. 

El cirujano maxilofacial de Clínica Tarapacá sostuvo que el bruxismo nocturno, se logra detectar, principalmente, cuando genera síntomas, tales como dolor al despertar en las articulaciones de la mandíbula, o ruidos al abrir y cerrar la boca. “Muchas veces son los padres o la misma pareja quienes acusan los ruidos realizados durante la noche”, indicó. 

Si bien el bruxismo es un trastorno que afecta principalmente a la población entre 25 y 44 años, el especialista expresó que este también se presenta en niños durante el recambio dentario o a causa de trastornos del sueño. También destacó que el bruxismo no sólo genera problemas en la salud dental, como el desgaste de los dientes, dolor y sensibilidad, e inclusive fracturas dentarias, sino que “también puede provocar dolor orofacial, dolores a nivel cervical y de oído”.

¿CÓMO SABER SI SUFRO BRUXISMO?

Esta presión o rechinido que realizan los dientes, pueden responder a diversos factores, pues según señaló el odontólogo, “algunos casos se debe a trastornos del sueño provocados por una mala preparación del sueño, Síndromes de Apneas e Hipopnea Obstructiva del Sueño (SAHOS) y roncopatía”. 

Por otro lado, el maxilofacial de Clínica Tarapacá, Carlos Lobos, afirmó que “el 70% de los casos de bruxismo se asocian a estrés” y que “existen otros factores relevantes tales como la ansiedad, entornos laborales desfavorables y conductas asociadas al consumo de sustancias psicoactivas, cafeína o drogas” y añadió que en algunos casos, también se relaciona con el padecimiento de enfermedades sistémicas como párkinson, trastornos neurológicos y trastornos de hiperactividad. 

Respecto al tratamiento del bruxismo, el especialista explicó que existen dos tipos de tratamientos para este trastorno, que se dividen en conservadores y quirúrgicos:

  • Tratamientos conservadores: Terapia bioconductual e higiene del sueño, manejo kinésico y de fisioterapia, uso de férulas rígidas, medicamentos con analgesia, y relajantes musculares. En algunos incluye una evaluación psicológica.

  • Tratamientos quirúrgicos: Infiltración de ácido hialurónico, artrocentesis (lavado articular), infiltración de bótox, cirugía artroscópica, y cirugía abierta. 

Finalmente, el profesional de Clínica Tarapacá recalcó que respecto al adecuado manejo del bruxismo es fundamental seguir un tratamiento bajo la supervisión y en compañía de un especialista, ya sea un odontólogo especializado en trastornos temporomandibulares, o un cirujano maxilofacial.