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Maulino representará a Chile en torneo Sudamericano de Atletismo sub 23

  • Jueves 14 de octubre de 2021
  • 11:31 hrs

Camilo Reyes, lanzador de bala y estudiante de Tecnología Médica en la UCM, forma parte de la delegación nacional en el certamen a realizarse en Guayaquil, Ecuador este 16 y 17 de octubre.

Proveniente de la pequeña localidad de Melozal (de Linares hacia la Costa), el joven atleta Camilo Reyes, sueña con darle una medalla a Chile en el Campeonato Sudamericano de Atletismo sub 23 a disputarse en Guayaquil, Ecuador, este 16 y 17 de octubre.

Antes de su partida, Camilo Reyes que además de ser deportista estudia Tecnología Médica en la Universidad Católica del Maule, donde ya cursa su tercer año de la carrera, comentó que dentro de sus objetivos en este certamen internacional está el poder subirse al podio en la competencia de lanzamiento de la bala.

“Mis expectativas son pelear una medalla. Lo realista es pensar en una de bronce o plata, ya que las marcas con los otros países son más o menos parejas, salvo el primer lugar (Nazareno Sasiade Argentina) que se aleja bastante”, reflexionó el joven que entre sus principales logros deportivos figura el haber ganado el 2018 los Juegos Binacionacionales y los Nacionales y el 2019 fui segundo nacional y cuarto sudamericano.

Una carrera que ha ido en ascenso, pero que se tuvo que ver frenada producto de la pandemia, que hizo que se suspendieran las competencias deportivas durante casi todo el 2020 y parte del 2021.

Justamente por esta situación, para clasificar al Torneo Sudamericano sub 23, el que se realiza año por medio, hubo que idear un sistema distinto para escoger a los representantes nacionales, considerando que las delegaciones están compuestas por apenas 24 deportistas (12 damas y 12 varones). “La forma de clasificar antiguamente era alcanzando una marca, pero ahora es a través de una tabla de puntajes ponderados”, explicó Camilo Reyes, agregando que “en mi caso mi puntaje fue de 1.033 puntos, lo que es muy alto, considerando que el máximo son 1.100″, aclarando que se equiparan las marcas, es decir, un salto da un cierto puntaje que puede ser comparado con un lanzamiento o un tiempo en una carrera de velocidad.

A ese puntaje además se le suma la posición en el ranking nacional y el chileno, donde Camilo es primero en Chile a nivel sub 23 y entre los 4 mejores en el ranking adulto y quinto a nivel sudamericano, en el ranking sub 23, teniendo como su lanzamiento record 16.93, metros.

Deporte y estudios

Su historia de éxitos deportivos la acompaña también con un excelente desempeño académico. Camilo está cursando el tercer año de la carrera de Tecnología Médica en la Universidad Católica del Maule, donde además de no reprobar ningún ramo, fue uno de los casi 500 estudiantes de esa casa de estudios que recibió un computador en el primer semestre de este año, beneficio que se entregó para motivar a aquellos jóvenes que han tenido buenas notas.

De todas formas, para el atleta que estará en el Sudamericano sub 23, no ha sido sencillo compatibilizar deporte y estudios, aunque reconoce que, con la modalidad online actual, producto de la emergencia sanitaria, se le ha hecho más sencillo.

“Es más cómodo la modalidad online que la presencial, pero ahí uno sacrifica ciertas cosas, como por ejemplo el entrenar todos los días con el entrenador en la misma Universidad (Cristián Salazar). Además, con la modalidad presencial, se trasnocha mucho estudiando, sobre todo al comienzo, ya que ingresar a estudiar a la Universidad fue un cambio grande. Ahora es más sencillo organizarse porque las clases quedan grabadas, por lo que se pueden maximizar los tiempos”, señaló luego el joven.

Clave el apoyo de la familia

Pese a sus logros, la carrera deportiva de Camilo Reyes no se remonta tan atrás, comenzando recién el 2017, cuando estaba en tercero medio y donde destacaba por ser un excelente músico tocando el violín, hasta que, por un azar del destino, un día tuvo que participar en un torneo escolar lanzando la bala, comenzando así una historia, llena de logros. “En mi primer campeonato, cuando no sabía mucho, quedé séptimo nacional y luego ya con entrenador fui progresando”, resumió.

Desde ahí y con la motivación y apoyo brindado por su familia, profesionalizó su práctica deportiva, dedicándole una gran cantidad de horas, incluso en tiempos de encierro por la pandemia, donde debió ingeniárselas para continuar en un nivel competitivo.

“Mi papá es maestro en construcción y como sabe soldar hicimos un rac para las pesas y una banca y por suerte el 2019 mi hermano para mi cumpleaños me regaló pesas, sumado a que mi entrenador me facilitó otras mancuernas, logré llegar a los kilos que muevo y me pude organizar rutinas, concentrándome en la fuerza durante 7 a 8 meses”, relató.

“Para retomar los lanzamientos –continuó-, empecé lanzando en tierra y sin las zapatillas adecuadas, hasta que mi papá me hizo un foso en el patio de mi casa y ahí pude retomar con todo”, complementó luego Camilo.

Para terminar, el atleta y estudiante, le dejó un mensaje a los chicos que quieren entrar a la Universidad y que son deportistas. “Existe un concepto en el deporte que se llama proyección. Sin embargo, hay veces que a uno le dicen que por estatura o por no tener alguna capacidad, no se va a poder superar esta proyección, pero yo creo que va todo en las ganas. A mí nunca me han faltado las ganas de querer mejorar, de entrenar y pese a que soy pequeño y no tengo los brazos ideales para este deporte, igual me ha ido bien. Siempre tuve esa pasión ya que lo más importante es que a uno le guste, por lo que el mensaje es que le pongan no más, es normal que las cosas cuesten, pero siempre se puede, es muy importante no ser conformista”, finalizó.